Hoy queremos contaros nuestra experiencia en la tienda "Croqueta y Presumida", la cual hemos conocido hace muy poco tiempo pero que se ha convertido en un gran descubrimiento para nosotros y una de nuestras tiendas favoritas.
Son una empresa de origen vasco que cuenta ya con 32 tiendas por toda España (en breve abrirán 3 más), y que nació con la idea de ofrecer croquetas elaboradas diariamente con leche fresca del caserío, conservando el sabor, aroma y textura de una croqueta casera.
Tiene una amplísima variedad de sabores (que puedes ver en la imagen de debajo o aquí), nosotros tuvimos la posibilidad de probar todos los salados, su sabor es muy suave y la textura muy cremosa de la bechamel mezclada con cada ingrediente (que por cierto, todos ellos se notan en cada una de las croquetas, cosa que nos encantó, ya que no son como otras muchas que apenas diferencias un sabor de otro).
Hay incluso una especialmente creada para los más golosos de la casa: ¡de chocolate! Diseñada por el maestro chocolatero vasco Rafa Gorrotxategi, es toda una delicia.
En la tienda las tienen expuestas de forma fresca (listas para freír) o si quieres también las puedes pedir fritas para degustar en el momento. Al comprarlas te indican cómo se deben freír para hacerlo de forma uniforme y conseguir que queden crujientes por fuera y suaves por dentro.
Aunque la croqueta es su producto estrella, también cuentan con una amplia variedad de productos recién cocinados, otros listos para cocinar y embutidos envasados al vacío para conservar todas sus cualidades.
También tienen otro producto propio llamado salsa "Bastarda" con dos variedades, con pimiento rojo y pimiento verde, que adapta la receta que preparaban los marineros cántabros durante el siglo XV a base de sidra fermentada y cayena para crear una salsa extremadamente picante que les protegía del escorbuto. Se decía que era el único momento en que los marineros se permitían llorar, debido al picante, ¡y es que hay que ser muy valiente para probarla!
Tras charlar un rato con la dependienta, llegamos a casa con nuestra caja de sabores variados de croquetas frescas, en la cual nos graparon un papel con el orden en que las han colocado para que luego sepas diferenciarlas fácil y rápidamente (¡otro punto a su favor!).
Las freímos en un cazo pequeño con abundante aceite caliente durante 1 minuto para que se doraran. El resultado lo podéis ver en la foto, ¡no quedó ni una! Nos gustaron todas mucho, la verdad, porque además de los sabores más tradicionales como jamón y pollo, tienen otros muy novedosos que no habíamos probado nunca en una croqueta. Uno de nuestros favoritos fue la croqueta "pecado capital", con relleno de gulas al ajillo, ¡simplemente espectacular!
En resumen, os animamos a que conozcáis "Croqueta y Presumida" porque la comida que ofrecen es casera, rica y preparada a diario con mucho cariño. El trato de sus empleados, bajo nuestra experiencia, no pudo ser mejor, la dependienta fue encantadora con nosotros y nos explicó en detalle toda la variedad de productos mientras colocaba con muchísimo mimo cada croqueta.
Bon appétit!
